Ayer fue un día agitado...y de suerte.
Estaba en casa bastante tranquilo, cuando llamaron al timbre y apareció mi tía de Madrid y uno de sus hijos.
Corrí a esconderme porque no me gustan las visitas.
Menos mal que salieron a comer...pero volvieron pasado un buen rato...pero
menos mal que después, ya se fueron definitivamente.
Cuando estaba a punto de salir de mi escondite, porque además llevaba un buen rato con hambre, volvieron a llamar al timbre y entró un chico.
Yo, desde una de las múltiples cajas que pueblan mi casa, escuchaba la conversación.
Hablaban sobre Flequillo. Creo que Él tambien estaba escuchando.
A medida que transcurría la conversación, notaba cómo a mi madre, muy atenta, se le iban poniendo las orejas en punta como un elfo, y una sonrisa enorme, como el Gato de Cheshire.
Estaba encantada, el Bene también.
Es más, en algún momento que se quedaron solos, mientras el chico estaba con Flequillo, se miraron y dijeron: " ¡Mejor es imposible!"
Estaba en casa bastante tranquilo, cuando llamaron al timbre y apareció mi tía de Madrid y uno de sus hijos.
Corrí a esconderme porque no me gustan las visitas.
Menos mal que salieron a comer...pero volvieron pasado un buen rato...pero
menos mal que después, ya se fueron definitivamente.
Cuando estaba a punto de salir de mi escondite, porque además llevaba un buen rato con hambre, volvieron a llamar al timbre y entró un chico.
Yo, desde una de las múltiples cajas que pueblan mi casa, escuchaba la conversación.
Hablaban sobre Flequillo. Creo que Él tambien estaba escuchando.
Recuerdo que el chico decía que no le importaba el aspecto, pero además como le parecía precioso,
pues mejor.
Lo que le gustaría es que fuera un gatito mimoso para poder estar juntos en el sofá, darle muchas caricias y oírle ronronear.Iba a hacerle muchas fotos, porque era fotógrafo ( de los de verdad) y además le gustaba la fotografía de naturaleza.
Desde niño había vivido con animales y se relacionaba muy bien con ellos
Desde niño había vivido con animales y se relacionaba muy bien con ellos
A medida que transcurría la conversación, notaba cómo a mi madre, muy atenta, se le iban poniendo las orejas en punta como un elfo, y una sonrisa enorme, como el Gato de Cheshire.
Estaba encantada, el Bene también.
Es más, en algún momento que se quedaron solos, mientras el chico estaba con Flequillo, se miraron y dijeron: " ¡Mejor es imposible!"
Además fue tan encantador, palabras de ellos, que les preguntó cuánto costaba la adopción,
a lo que le respondieron que no cobraban nada, pues bastante favor era el que le dieran una oportunidad. Aunque si quería hacer un donativo, siempre sería bien recibido porque esta asociación es muy, pero muy limitada a todos los niveles; económicos y también en cuestión de personal.
Y lo hizo, algo que le agradecen todos los gatos del pueblo.
Así que ayer fue un día de suerte para muchos, para los gatos de la calle porque hay algo más de dinerín con el que ayudarles.
Para mi, porque hubo un momento de horror cuando veía a mi madre y al Bene tan encantados, en el que pensé "No sólo se van a quedar con Flequillo, sino que encima van a adoptar a este chico también".
Y para Luis, que ha adoptado a una ricura de gatito y pudo salir de mi casa (creo que en algún momento, también temió que pudieran secuestrarlo aquellos dos entusiastas)
Y para Luis, que ha adoptado a una ricura de gatito y pudo salir de mi casa (creo que en algún momento, también temió que pudieran secuestrarlo aquellos dos entusiastas)
Y fundamentalmente para Flequillo.
Ha tenido suerte, me parece que le ha tocado un humano sensible, amoroso y además un artista.
Ha tenido suerte, me parece que le ha tocado un humano sensible, amoroso y además un artista.
Por la noche les contó cómo había sido el viaje y la llegada a su nueva casa, y esta mañana también dió noticias.
Flequillo, que la suerte te siga acompañando toda tu vida y que esta sea larga,
pero sobretodo muy feliz.